El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha hecho público el documento de trabajo con la propuesta provisional de los Ecoesquemas, el cual servirá como base para el diseño final de los mismos.

Nota preliminar: Esta propuesta tiene como objetivo facilitar el trabajo de elaboración del Plan Estratégico de la PAC. Por lo tanto no tiene carácter definitivo ni vinculante sobre el contenido final del Plan. Este documento no deja de ser una propuesta de trabajo que incluye las prácticas de insumos inicialmente propuestas como ecoesquema secundario, a la espera de determinar cómo se incorporarían, en su caso, al ecoesquema principal fruto de las los debates y reuniones que se mantienen con las CCAA, autoridades ambientales y el propio diálogo estructurado con la Comisión Europea.

  1. ARQUITECTURA MEDIOAMBIENTAL Y CLIMÁTICA

El Plan Estratégico de la PAC para España, a través de la arquitectura medioambiental y climática de su estrategia de intervención, dará respuesta a las necesidades identificadas de una forma coordinada con las intervenciones PAC (intervenciones nacionales-ecoesquemas, y regionales), así como como de herramientas externas (instrumentos y políticas nacionales).

La estrategia de intervención estará orientada a los resultados y estructurada en torno a los objetivos específicos de la PAC.

La condicionalidad forma parte de la arquitectura medioambiental y climática de la PAC, como base de referencia para compromisos medioambientales y climáticos más ambiciosos. Es la línea de base tanto para los ecoesquemas como para las agroambientales.

  1. RECOMENDACIONES DE LA COMISIÓN PARA OBJETIVOS MEDIOAMBIENTALES, OBJETIVOS SOCIAL Y DE CONSUMIDOR RELACIONADOS CON EL MEDIOAMBIENTE Y EL CLIMA: NECESIDADES IDENTIFICADAS Y PRIORIZADAS.

Con el fin de que el diseño de las intervenciones sea el más apropiado y se maximice la contribución a los objetivos de la PAC, la planificación de la Estrategia Nacional de la PAC de España se ha basado en un análisis previo de los contextos locales y una evaluación de las necesidades en relación con los objetivos de la PAC.

La evaluación de necesidades incluye la identificación, priorización y descripción de necesidades correspondientes a cada objetivo específico en base a los resultados del análisis DAFO realizado previamente.

Los objetivos específicos (OE) de la nueva PAC que se pueden relacionar con el medioambiente y la lucha contra el cambio climático, y las necesidades detectadas y priorizadas, y su relación con las recomendaciones de la Comisión son los siguientes:

OE 4. Contribuir a la atenuación del cambio climático y a la adaptación a sus efectos, así como a la energía sostenible

OE 5. Promover el desarrollo sostenible y la gestión eficiente de recursos naturales tales como el agua, el suelo y el aire

OE 6. Contribuir a la protección de la biodiversidad, potenciar los servicios ecosistémicos y conservar los hábitats y los paisajes

  1. ECOESQUEMAS

3.1 PRINCIPIOS GENERALES (Universalidad/Eficacia/Simplificación)

Los Ecoesquemas (EE) son una intervención clave en la arquitectura medioambiental de la nueva PAC, con una importante dotación presupuestaria para que los Estados Miembros concedan una ayuda al agricultor que realice una serie de prácticas beneficiosas para el clima, el medioambiente y el bienestar animal, que respondan a los objetivos medioambientales tanto en lo que se refiere al cambio climático (OE4) como al desarrollo sostenible y la gestión eficiente de los recursos naturales (OE5) y a la protección de la biodiversidad, servicios ecosistémicos, hábitats y paisajes (OE6).

El análisis de la situación de partida en España ha permitido detectar un buen número de necesidades a atender bajo estos objetivos, muchas de ellas prioritarias y entre las que destacan las relacionadas con: el aumento de la capacidad de sumidero de Carbono de los suelos, la mejora de la calidad y la conservación de los suelos, combatir la erosión y la desertificación, minimizar las emisiones de gases de efecto invernadero, reducir la vulnerabilidad de nuestros sistemas agrarios al cambio climático y el mantenimiento y recuperación de la biodiversidad natural.

Asimismo, el mencionado análisis, una vez más, ha puesto de manifiesto que si hay algo que caracteriza a la agricultura española es su marcada diversidad no sólo por la diversidad de producciones, mediterráneas y continentales, sino también en lo que a sistemas o modelos productivos se refiere con características y condicionantes propios que afrontan de distinta manera el cambio climático y el reto que supone la transición hacia modelos de producción más sostenibles (OE2).

Esta diversidad supone a la vez un desafío y una oportunidad a la hora de diseñar y poner en marcha los ecoesquemas en nuestro país.

Una oportunidad porque ante los retos y objetivos medioambientales planteados podemos responder mediante un amplio abanico de acciones o prácticas a realizar en todas y cada una de las superficies agrarias atendiendo, entre otros a sus condicionantes agrofísicos y a sus condiciones agroclimáticas.

Un desafío, porque esta diversidad conlleva una complejidad en el diseño, aplicación y gestión de los ecoesquemas que podría acabar comprometiendo su eficacia medioambiental.

Por estas razones, se antoja fundamental, por un lado, el desarrollo de unos ecoesquemas de amplia penetración, de tal modo que todos los agricultores sea cual sea su producción y su modelo productivo puedan acogerse al menos a una de las prácticas beneficiosas para el clima y el medio ambiente que se establezcan. Y por otro, que el sistema sea suficientemente atractivo para los agricultores y ganaderos, tanto mediante una remuneración adecuada, como principalmente, por la simplificación necesaria para no poner en riesgo alcanzar de una manera eficaz los objetivos ambientales, logrando además una planificación, gestión y control adecuados.

Todo ello, apostando por la digitalización y la agricultura de precisión como elementos fundamentales para hacer frente a los nuevos retos climáticos, conforme al objetivo transversal de esta nueva PAC y con el fin último de avanzar en la sostenibilidad de nuestra agricultura bajo los compromisos adquiridos en el “Pacto Verde Europeo” y en las Estrategias de la Granja a la Mesa y de Biodiversidad que de él derivan.

 

3.2 PROPUESTA DE ECOESQUEMAS

Bajo los principios anteriores y para dar respuesta a las necesidades detectadas se proponen dos ecoesquemas: uno principal y otro complementario.

Bajo el Ecoesquema principal, se concederán pagos para el clima y el medio ambiente para los beneficiarios que voluntariamente los soliciten y lleven a cabo en las hectáreas elegibles de su explotación al menos una práctica relacionada, bien con la Agricultura Baja en Carbono, bien con la Agroecología, a elegir entre las 7 siguientes:

ECOESQUEMA PRINCIPAL
AGRICULTURA BAJA EN CARBONO AGROECOLOGÍA
P1 Pastoreo Extensivo P2 Siega Sostenible
P4 Agricultura de conservación siembra directa P3 Rotación de cultivos con especies mejorantes
P6 Cubiertas vegetales vivas P5 Áreas no productivas en tierras de cultivo
P7 Cubiertas vegetales inertes

 

A este ecoesquema, se destinará el 90 % de la dotación prevista para los ecoesquemas que asciende a 996,7 M€ si tomamos en consideración un límite del 23 % para esta intervención.

La remuneración de todas estas prácticas tendrá carácter compensatorio y será mediante un importe unitario por hectárea elegible.

Un primer planteamiento es que los beneficiarios del Ecoesquema principal, puedan además acogerse al Ecoesquema complementario. Este ecoesquema contaría con una dotación presupuestaria de 110,7 M€, es decir el 10 % de la dotación de los ecoesquemas, e incluye dos prácticas relacionadas con la Agricultura de Precisión entre las que se podrá elegir una.

ECOESQUEMA COMPLEMENTARIO
AGRICULTURA DE PRECISIÓN
P8 Gestión Sostenible de Insumos
P9 Pastoreo Racional (Rotación de especies y Parcelas).

 

La práctica relativa a la Gestión Sostenible de insumos (P8) tendrá carácter incentivador mientras que el pastoreo racional dado que va asociado a una superficie determinada irá dirigido a compensar los costes adicionales y el lucro cesante derivados de su realización.

En todo caso, se está valorando también de cara a la propuesta definitiva la integración de los importes y requisitos del ecoesquema secundario en las prácticas del ecoesquema principal.

En resumen, tendríamos ecoesquemas bajo tres temáticas: Agricultura Baja en Carbono, Agroecología y Agricultura de Precisión que apoyarían la realización de nueve prácticas beneficiosas para el clima y el medioambiente

 

3.3 APLICACIÓN Y DESARROLLO DE LOS ECOESQUEMAS

La universalidad y el equilibrio en el desarrollo de los ecoesquemas viene determinado de tal modo que sea cual sea el tipo de superficie elegible que el agricultor tenga a su disposición pueda elegir al menos entre dos prácticas a realizar de entre las disponibles en el Ecoesquema principal y una de las establecidas en el Ecoesquema complementario, tal y como sigue:

En aras de la simplificación y atendiendo a la naturaleza de las prácticas y de las necesidades que cada una de ellas cubre, los tipos de superficie sobre los que se realizarán las prácticas se han determinado bajo criterios agrofísicos y agroclimáticos, englobando toda la superficie de nuestro país en 9 tipos:

– Pastos húmedos

– Pastos mediterráneos

– Tierras de cultivo de secano húmedas (cornisa cantábrica)

– Tierras de cultivo de secano

– Tierras de regadío

– Cultivos permanentes en pendiente mayor o igual del 10 %

– Cultivos permanentes en pendiente entre el 5 % y menor del 10 %

– Cultivos permanentes en pendiente menor del 5 %

 

Como decíamos anteriormente, para cada una de ellas el agricultor cuenta con varias opciones a elegir, no pudiendo realizar sobre una misma superficie más de dos prácticas: una práctica de las del Ecoesquema principal y otra del Ecoesquema complementario, existiendo además ciertas limitaciones:

– La agricultura de conservación-siembra directa (P4) sólo podrá realizarse y por tanto, ser remunerada, en zonas de alto riesgo de erosión o desertificación.

– La siega sostenible (P2) sólo podrá realizarse en aquellos pastos que por su tipología o características sean susceptibles de siega.

– También en el caso de los pastos, la gestión sostenible de insumos del Ecoesquema compensatorio (P8), sólo podrá realizarse en aquellos que requieran su uso (pastos objeto de fertilización) y no será compatible en ningún caso con el desarrollo del pastoreo racional (P9).

Todas las prácticas serán anuales, lo que supone una simplificación.

Con la excepción de la gestión de insumos (P8), cuyo pago será incentivador, el resto de prácticas contarán con un pago compensatorio dirigido a cubrir en la medida de lo posible, conforme a la disponibilidad presupuestaria, el lucro cesante y los costes derivados de su puesta en marcha.

Esto es así para cumplir con los compromisos derivados de la OMC dado que estas ayudas desacopladas de la producción tienen la consideración de caja verde.

Como se observa en el cuadro, todas y cada una de las prácticas recogidas van más allá de la línea de base prevista en la condicionalidad reforzada, relacionando para cada una de ellas las BCAM implicadas.

En los anexos se muestran los detalles de cada una de las 9 prácticas recogidas bajo los ecoesquemas, indicando además las necesidades a las que responden dentro de cada OE.

Los importes corresponden solo al 90% del presupuesto disponible para ecoesquemas, ya que no están reflejados los del ecoesquema secundario.

El documento completo, lo pueden consultar en el siguiente enlace:

https://www.mapa.gob.es/es/pac/post-2020/propuesta-provisional-de-ecoesquemas-en-el-marco-de-la-arquitectura-ambiental-del-pepac-julio-2021_tcm30-571865.pdf