Estados Unidos ocupa el puesto décimo noveno en producción de aceite de oliva. Es el segundo país productor de América. Cuenta con 88.000 hectáreas de olivar, y es capaz de producir 162.580 toneladas brutas de aceituna. Es uno de los pocos países que actualmente no cuenta con olivares tradicionales, su cultivo es exclusivamente moderno (intensivo y en seto), ya produce aceite de oliva en 7 del total de sus estados.

 

EEUU, es el mayor consumidor de aceite de oliva fuera de la UE. Lo consumen en mayor medida las mujeres que los hombres, situándose en un 51% y 49% respectivamente. Además, la edad dónde predomina este consumo es en personas mayores de 65 años. Las familias estadounidenses que más lo consumen son familias de mediana edad con hijos.

 

Las personas que tienen una renta media, son aquellas que consumen una mayor cantidad de este aceite, proporción que se sitúa en un 52%. Destacar, que las personas que tienen estudios superiores consumen mayor cantidad de aceite de oliva que aquellos que no tienen estudios.

 

De las distintas tipologías de aceite de oliva, en EEUU predomina el aceite de oliva en un 46%, seguido del aceite de oliva virgen con un 36%.

El consumo estadounidense de aceite de oliva ha ido creciendo paulatinamente en la última década, con un incremento del 25,77%.  Los principales factores que han impulsado el progresivo crecimiento de la demanda de aceite de oliva en Estados Unidos son, la percepción de beneficios para la salud asociados al aceite de oliva como parte fundamental de la Dieta Mediterránea; proliferación de la cultura culinaria, inspirada en platos mediterráneos y de alimentación gourmet entre la población estadounidense; y la continua e importante avalancha de recetas de chefs en donde prescriben usar aceite de oliva virgen extra.