Lorenzo León, Raúl de la Rosa
IFAPA, Centro Alameda del Obispo, Córdoba
Desde hace más de dos décadas el Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (IFAPA) desarrolla un programa de mejora genética para la obtención de nuevas variedades de olivo mejor adaptadas a las tendencias actuales de la olivicultura a partir del cruzamiento de las variedades tradicionales ya existentes. El objetivo global es obtener variedades productivas, con corta entrada en producción desde la plantación, con baja tendencia a la vecería, alto rendimiento graso y calidad de los aceites. A partir de este objetivo global, que se aplica a todas las nuevas variedades que se van seleccionando, el programa de mejora se ramifica en varias líneas para atender a diversas demandas del sector.
Una línea se centra en la obtención de variedades resistentes a Verticilosis. Se han realizado numerosos cruzamientos de variedades resistentes y productivas, como las anteriormente descritas, y después de más de 15 años de experimentación, se han registrado tres nuevas variedades resistentes y se dispone de otras selecciones que continúan en evaluación. A esta línea de trabajo se ha unido recientemente la generación de variedades resistentes a Xylella fastidiosa; sin embargo, la evaluación de la resistencia a esta bacteria conlleva ensayos de campo de un mínimo de 4-5 años de duración, lo que implica que se tardará bastante en tener nuevas variedades en esta línea. Además, hasta ahora, se han identificado pocas variedades de olivo con un nivel de resistencia suficiente como para actuar de genitores en esta línea de mejora.
Otro objetivo muy actual es la obtención de variedades adaptadas al cultivo en seto; es decir, con poco vigor y adaptación a la formación en alta densidad y recolección con cabalgadora. Así, la primera variedad de olivo obtenida por mejora genética fue registrada fruto de la colaboración de nuestro Instituto IFAPA y la Universidad de Córdoba. Se denomina ‘Sikitita’ y en los últimos años está teniendo una buena acogida por su porte especialmente llorón, muy bien adaptado a la formación en seto. Actualmente, en esta línea de mejora, estamos poniendo especial empeño en obtener variedades con alto contenido en fenoles y oleico, que son muy necesarias en el mercado actual de las variedades en seto. En esta línea, hemos registrado recientemente, también en colaboración con la UCO, las variedades ‘Sikitita-2’ y ‘Martina’, que han salido recientemente al mercado y que tienen una alta estabilidad en el aceite.
La agricultura ecológica es otro sistema de cultivo cada vez más extendido en olivo. Es por ello que algunos de nuestros ensayos de futuras nuevas variedades de mejora están implantados con el objetivo de comprobar su adaptación a este sistema de cultivo.
Por último, también nos preocupa el efecto que en olivo tenga el calentamiento global pronosticado en la actualidad por efecto del cambio climático. Con tal fin estamos realizando trabajos para determinar de manera precisa los efectos del aumento de temperatura en el olivo. Hemos identificado la descoordinación de la floración, el adelanto de la acumulación de aceite y la disminución de su estabilidad como los problemas principales. Ahora estamos trabajando para evaluar si hay variedades que resistan más estos efectos adversos del cambio climático, para después iniciar una línea de mejora en este sentido.
En definitiva, en el IFAPA entendemos que la aparición de nuevas variedades modernas y más adaptadas a superar los retos actuales de la agricultura representarían una herramienta muy importante para incrementar la rentabilidad actual de las explotaciones olivareras y garantizar su sostenibilidad a largo plazo.