Antonio Alcaraz

Jaén distrito Minero: Cartografías

8 julio – 5 septiembre 2021

Miércoles a domingo de 10:00 a 13:00 y de 18:00 a 21.00 horas

Lunes y martes cerrado.

 

Esta exposición es el segundo punto expositivo, se pudo visitar por primera vez la pasada primavera en el Museo íbero de Jaén. En el año 2019 en reunión de Patronato de Fundación Caja Rural de Jaén se aprueba llevar a cabo el proyecto expositivo de Antonio Alcaraz comisariado por Alicia Ventura que quiere ser una Visión Contemporánea de la Arqueología Industrial del eje minero de La Carolina – Linares.

 

Alicia Ventura, Valencia 1965 es  Historiadora del Arte y músico de formación, máster en Gestión Cultural por ESADE y la Universidad Pompeu Fabra.
Comisaria independiente y directora de proyectos artísticos.
Comisaria y asesora del Programa Arteria DKV y directora de la Colección de Arte DKV, dirige también el proyecto artístico de la Fundación DKV Integralia y el proyecto cuidArt del Hospital Marina Salud de Denia, donde se ha especializado en temas de Arte y Salud, dirigiendo desde sus inicios el “Congreso Internacional de Espacios de Arte y Salud”. En el marco de estos programas ha comisariado decenas de exposiciones tal y como la que presentamos ahora. Alicia es buena conocedora de la obra del artista alicantino y ha seleccionado la obra expuesta, los textos y organizado el discurso expositivo de la exhibición para su correcta lectura.

 

El artista Antonio Alcaraz, Alicante 1963 tiene una dilatada trayectoria en el mundo del arte desde su licenciatura en Bellas Artes en la facultad de San Carlos de Valencia, en la que en la actualidad es profesor del Departamento de Dibujo.

 

En su producción artística compagina la pintura, con el grabado y la edición de libros de artista, precisamente en este último apartado colabora con el colectivo giennense Asociación Libro de Artista que años pasados han realizado el proyecto Tierras áridas que ha agrupado y recopilado obra de talleres de Londres, México, Valencia y Jaén. Pero lo que parece atraer la mirada artística de Alcaraz, desde hace ya unos años son los paisajes de lugares improductivos o los terrain vague del filósofo y arquitecto Sola – Morales.

 

Son espacios que han dejado de ser productivos, pero cuya presencia han dejado huella en el paisaje dándole si se quiere un aspecto romántico. En el objetivo de su obra está tanto la de documentar estos lugares, como la de darlos a conocer y divulgarlos. Dentro de sus series de Arquitectura Industrial Antonio se ha sentido atraído por temáticas de muy diferente naturaleza como es el caso de la exposición Espacios Industriales auspiciada por la Comunidad Valenciana con un interés claro de documentar faros, arquitecturas o instalaciones portuarias en desuso, pero también se ha sentido atraído por infraestructuras metálicas como puentes o ahora en el proyecto que nos ocupa, por los restos de lo que fue la producción minera en el Distrito Minero de Jaén, Linares – La Carolina.

 

Arquitecturas en desuso que han dejado su huella en el paisaje de la comarca norte de Jaén en donde la actividad minera se desarrolla en la zona desde hace 4.000 años tal y como atestigua una estela romana, o que fue unos de los incentivos para que los colonos venidos en tiempos de Carlos III se instalasen las nuevas poblaciones de Sierra Morena. Lugar que vino a tener su momento más álgido a partir de los años 50 del siglo XIX donde se iniciaron las condiciones que propiciarían el boom de finales del XIX llegando a doblar la población de La Carolina y a sextuplicar la de Linares. Todo ello como es lógico trajo consigo la alteración de las ciudades, pero también la de los paisajes generando la construcción entre otros de: líneas ferroviarias para facilitar la salida del mineral, cables aéreos, centrales hidroeléctricas, casas de máquinas, pozos maestros, pocillos, escombreras y un largo etcétera que han dejado su huella en el paisaje tras el abandono definitivo de la extracción minera en el año 21 del pasado siglo.

 

Son esas estructuras diseminadas en el paisaje de la comarca Norte fundamentalmente de las localidades de Linares y La Carolina, pero también de Santa Elena, Bailen, Baños de la Encina, Guarromán y Vilches las que Antonio Alcaraz fotografía e interpreta desde su personal visión para exponerlas en los próximos dos meses en el Museo Íbero.