Se enmarca dentro del Área Cultural de Fundación Caja Rural de Jaén, desde la que pretendemos desarrollar actividades culturales de diferente etiología en Jaén y su provincia.

En las actividades que venimos haciendo en el Espacio La Rural cada mes, pretendemos presentar a los medios y al público en general las nuevas adquisiciones que se van incorporando a nuestra colección de arte de temática rural y que quiere ser un homenaje a los agricultores y al medio rural, germen de nuestra Fundación.

Antonio Muñoz Degraín (Valencia, 1843 – Málaga, 1924)

Estudio para las Walkirias,

óleo sobre lienzo, 76 x 100 cm

Muñoz Degraín fue uno de los artistas más reconocidos del XIX en España. Recibió numerosas medallas en la exposiciones nacionales, desde 1862 hasta 1910 y fuera de nuestras fronteras expondría en las Universales de, Filadelfia (1876), Múnich (1883) y Chicago (1893).

Fue catedrático de paisaje en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, sustituyendo a Carlos de Haes, y posteriormente sería director de la Escuela y miembro de la Real Academia.

En los museos de bellas artes de Valencia y Málaga se encuentran conjuntos importantes de sus obras que el pintor regaló en vida, pero su obra se conserva también en otros museos españoles, como el Prado o el Thyssen, entre otros.

Se le consideraría uno de los exponentes más destacados de la pintura española de la segunda mitad del siglo XIX y renovador del género de historia y del paisaje. Artista longevo y de una gran capacidad creadora experimentó una evolución constante hasta el final de su vida. Hacia el final de ella pintó numerosas obras de marcada personalidad, independientes del arte de su momento, aunque en ellas se pueden encontrar influencias de la pintura moderna de su tiempo, como del posimpresionismo francés.

Como se ha dicho, sería uno de los artistas renovadores del género del paisaje, que se habría iniciado a mediados del siglo XIX, y aportaría a éste una nueva percepción más imaginativa y de factura muy resuelta en donde el color toma un gran protagonismo.

El cuadro que presentamos ahora es un buen ejemplo de su carácter moderno y renovador, así como de su capacidad renovadora de la pintura de paisaje. Podría tratarse de un estudio previo, o bien una versión posterior reducida, del cuadro que el autor tituló Las Walkirias, que terminaría en abril de 1915 y se encuentra en el museo de bellas artes de Valencia, obra que tuvo una gran repercusión en la época dada la calidad de ejecución y lo atractivo de su composición, muy influenciada por el gusto wagneriano. Muñoz Degraín realizó el paisaje del cuadro a partir de distintos apuntes; la montaña es Sierra Nevada de Granada, que pintó en diversas ocasiones como en Paisaje granadino de 1915 o Pueblo de montaña de Granada y Sierra Nevada, mientras que el desfiladero al parecer se trata de uno en Alemania por donde transcurre el Rhin.

De esta composición se conocen otras dos versiones en colecciones particulares, una en Zaragoza y otra en Málaga. En la nuestra, las figuras mitológicas de las Valkirias no aparecen por lo que la opción de que se trate de un primer trabajo para crear un escenario para su cuadro Walkirias es plausible. De cualquier modo, el cuadro –firmado y fechado– es una obra ricamente elaborada que tiene las cualidades del artista experimentado en estas fechas finales de su carrera.