‘Escuela para familiares’ es el nombre que recibe el programa que la Asociación ‘Montilla Bono’ para personas con Trastornos Psicomotores y Afines de Andújar ha puesto en marcha con la colaboración de la Fundación Caja Rural de Jaén. Una iniciativa que pretende ser un instrumento de trabajo para la prevención del desarrollo del lenguaje y el aprendizaje de nuevas técnicas de comunicación.

Dentro de su programa de atención temprana a menores con edades comprendidas entre 0 y 6 años, el colectivo iliturgitano desarrolla un servicio a modo de orientación y formación en todas las áreas del lenguaje. Como principal novedad, en esta ocasión se impartirán clases de lengua de signos tanto a las familias como a los propios niños y niñas.

El gerente de la Fundación Caja Rural de Jaén, Luis Jesús García-Lomas, ha suscrito el acuerdo junto a la presidenta de la Asociación ‘Montilla Bono’, Rocío Morcillo. Una alianza que supone “un apoyo fundamental para que las familias puedan superar cualquier barrera comunicativa y prevenir posibles problemas educativos, sociales o de exclusión”.

A través de este programa, unas 150 familias tendrán la oportunidad de adquirir nuevas destrezas lingüísticas, así como recursos y herramientas para estimular el lenguaje en sus hijos. Una actividad que además favorece el proceso de reeducación logopédica, que este año se ve reforzado con la incorporación de la lengua de signos.

Rocío Morcillo ha destacado que la principal misión de su asociación es “seguir ofreciendo la mejor atención y apoyo posibles a las familias mediante tratamientos multidisciplinares que redunden en una mejor calidad de vida en su día a día”.

Rural Solidaria 2024

Esta convocatoria está destinada a impulsar proyectos desarrollados por entidades que trabajan en los ámbitos de la discapacidad, enfermedad crónica y adicciones.

Una línea de colaboración dirigida a las personas que pertenecen a asociaciones que trabajan en los ámbitos anteriormente mencionados y que serán los beneficiarios directos de las intervenciones de los profesionales. Además, los profesionales que trabajan con estos colectivos serán otro de los grupos beneficiados, ya que la mayoría de entidades destinan el importe de las ayudas a sufragar todo o parte de las nóminas o seguros sociales de las personas que intervienen en los proyectos.