Se enmarca dentro de la promoción cultural y del patrimonio histórico-artístico de la provincia de Jaén y está adscrito al programa La Rural Cultura a través del cual, Fundación Caja Rural quiere fomentar el arte y las actividades culturales en nuestra provincia.

La exposición se podrá visitar en el marco de Expoliva 2017, del 10 al 13 de mayo de 2017, desde la 10:00 a 8 de la tarde en el vestíbulo del edificio del Palacio de Congresos de Ifeja.

Con motivo de la XVIII Feria Internacional del Aceite e Industrias Afines se presenta la exposición El Reino del Olivo, con fotografías de Manny Rocca y poesías de Héctor L. Baz. La temática de la exposición no puede ser más acorde al desarrollo y motor de la feria, el aceite y su proceso de cultivo, recolección, transporte, molturación y envasado.

Es para nosotros un orgullo el que este trabajo editado y publicado por la Fundación de la Caja Rural de Jaén en el año 2015, haya sido reconocido por La Fundación para la Promoción y el Desarrollo del Olivar y del Aceite de Oliva con el XVIII Premio de Comunicación Expoliva 2017, sobre temas relacionados con el olivar y el aceite de oliva, y que se enmarca en la celebración de esta feria y que tiene previsto hacer su entrega el próximo viernes 12 en el marco de la feria.

En esta ocasión y debido al espacio hemos seleccionado un ramillete de imágenes del total de las 30, que Manny Rocca tomo durante el año 2001 en blanco y negro en nuestra provincia, acompañada de las poesías del poeta Héctor L. Baz. Fotografías y poemas que nos hacen descubrir a través de la quietud de las fotografías y el sonido de la rima poética, la belleza de este reino de olivos milenarios, de sus pueblos, de la labor callada de sus gentes, de sus vidas siempre llenas de esperanza y de nuevas generaciones que toman el relevo y que cambian las altas lanzas con las que los hombres acariciaban los nobles olivos, por máquinas que suavizan tan noble tarea, y el óxido de las antiguas almazaras y de los oscuros almacenes de antaño, por brillantes salas donde se exprime el zumo de aceituna, oro conservado con mimo en grandes gigantes de acero, listo para partir a los confines del mundo que cada año espera su sabor, a hierba fresca, a manzana perfumada, al amargor del trabajo sin descanso y a la dulzura de lo siempre bien hecho.